El 2020 ha sido de lejos el año más difícil para muchas familias, que de un momento a otro vieron a sus seres queridos partir para siempre debido a un fulminante virus llamado Covid-19, que consumió sus cuerpos en cuestión de días. Esta situación, generó que las fiestas de fin de año sean muy diferentes en comparación a otros años, y es que la pérdida de un ser querido modifica y altera las emociones. El proceso de duelo hace que las personas sientan tristeza y desconsuelo hasta llegar a la depresión.
Al respecto, la psicóloga Janette Santa Cruz, jefa del programa de salud mental en “Socios en Salud”, precisó que es importante que en esta etapa de duelo, cada persona viva su propio proceso de aceptación.
“Algunas personas pudieron partir y no necesariamente por el Covid-19 y no han podido hacer la despedida respectiva, por lo que la culpa puede aún estar presente, ahí lo que se debe tratar es trabajar el sentimiento de tristeza y pena, aceptando que lo que se vive es normal”, mencionó en Radio Nacional.
Sostuvo que a nivel familiar se debe conversar y planificar una agenda, donde se puede incluir las llamadas o videollamadas por medio de los aplicativos para estar conectados y darse consuelo.
En el caso de las personas adultas mayores o personas con discapacidad, la especialista manifestó que, aunque sean personas vulnerables, ellos requieren ser informados por sus familiares o cuidadores.
“Hay una gran tarea : tratar de informar sin generar falsas expectativas o una mala información”, anotó.
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